- En la conferencia “Caudalosa Poesía: Carlos Pellicer y Luis Cardoza y Aragón”, Alberto Enríquez Perea, académico de la UNAM, narró los viajes y aventuras que estos personajes vivieron en el viejo continente
En el Marco de las actividades de las “Jornadas Pellicerianas 2021”, se realizó la conferencia “Caudalosa Poesía: Carlos Pellicer y Luis Cardoza y Aragón”, a cargo de Alberto Enríquez Perea, académico de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma de México (UNAM) y miembro del Sistema Nacional de Investigadores.
El ponente recordó en su disertación la época en la que el “Poeta de América”, salió de México hacia Europa para emprender estudios y vivencias que quedaron plasmadas en su libro Hora y 20.
Rememoró la estancia de Pellicer en Paris y las aventuras y odiseas que vivió por el año 1925, junto a Luis Cardoza y Aragón, ensayista guatemalteco, que se hizo amigo inseparable del Pellicer y quien en alguno de sus poemas, homenajeó con tal gratitud al tabasqueño.
Tras leer varias de sus poesías, describió a los dos escritores americanos, como cómplices de viajes en Europa, Cuba, Marruecos, México, entre otros países; unidos por su pasión por el arte literario.
“En todo momento se mostraron respeto y agradecimiento mutuo, lo cual se demostraron en sus poemas. Hermanados siempre en la amistad y la poesía, así como en la afinidad de vida que tuvieron”, agregó.
Relató que en el libro “Práctica de Vuelo”, el inquieto Carlos le manifestó su gratitud a Alfonso Reyes, ministro de México en Francia, de quien tuvo siempre el apoyo cuando viajó de México a París, en 1926, con la idea de estudiar Aviación, y donde la amistad del escritor Cardoza y Aragón, fue esencial y definitiva, como parte de esa comunidad americana y literaria que conformaban.
El conferencista, explicó que el poeta José Vasconcelos, también tuvo relevancia en la vida de Pellicer, fue con él que conoció Brasil y Argentina, y en su libro “Memorias de Vasconcelos”, recuerda estos viajes junto al “Poeta de América”.
Al hablar de la obra de Pellicer “Hora y 20” de1927, el ponente comenta sobre el homenaje que el tabasqueño hace en este libro, a José Ingenieros, el educador que le valió la victoria en Europa, al otorgarle el boleto para su traslado.
Alberto Enríquez concluyó su participación en las Jornadas destacando las cualidades de Pellicer, que además de su aporte cultural, se distinguió por ser un hombre generoso, esplendido, atento, siempre dispuesto a ayudar en las mejores causas del mundo.